A veces una calle no es solo una calle: es una oportunidad para recordar y para honrar. Eso es lo que queremos con Natty Petrosino.
Natty fue una mujer que dejó todo para ayudar a los demás, que convirtió su casa del barrio Palihue en un refugio, que dio 7.000 comidas por día a los más necesitados y que llegó con su casilla rodante a los rincones más olvidados del país.
📍Por eso proponemos algo simple, pero con peso: que una calle de Bahía Blanca lleve su nombre.
De modelo a misionera
Natty Petrosino se llamaba Inocencia Rosa Hollmann y nació el 4 de junio de 1938 en Villa Iris, a poco más de 100 kilómetros de Bahía.
Estudió Medicina y Sociología en la UBA, fue modelo y actriz y vivió una vida cómoda en el barrio Palihue.
Hasta que a los 27 años todo cambió: en una operación tuvo una muerte clínica.
Y Según contó después, tuvo una experiencia divina:
“Dios me dijo que mi misión era ayudar a los más pobres”.
Siempre la puerta abierta
Natty vivía en Las Huertas 41 y tenía una frase bien clara: su casa siempre sería un lugar para quienes lo necesitaban. Y así fue. Abrió sus puertas sin vueltas, con la idea de que cualquiera que necesitara un techo o un plato de comida tuviera un lugar a donde ir.
Para ella no había diferencia entre un vecino, un amigo o alguien que simplemente pasaba por la calle buscando una mano. Fue una mujer que hizo de su casa un refugio.
7.000 platos por día
En 1978 fundó el Hogar Peregrino San Francisco de Asís, en avenida Pringles 950. Atendía también a personas con discapacidad, mujeres embarazadas, ancianos y pacientes terminales.
En sus años más fuertes llegó a dar más de 7.000 comidas por día.
Desde los años 90 Natty llevó su ayuda más allá de Bahía: recorrió el país con su casilla rodante asistiendo a comunidades del norte argentino y también viajó a ayudar a personas de otras partes del mundo. Llevaba medicamentos, construía escuelas, cavaba pozos, levantaba casas.
Un legado imborrable
Murió el 26 de julio de 2021 tras padecer un cuadro de coronavirus. Falleció en el Hospital Municipal de Bahía, ayudando hasta el último día.
👏 El Concejo Deliberante la declaró Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Bahía Blanca, recibió premios internacionales y fue nominada al Premio Nobel de la Paz en 2009.
Hasta el Papa Francisco reconoció su gran trabajo y afirmaba que Natty era nuestra Madre Teresa.
Políticos de todos los sectores la homenajearon cuando falleció:
“El legado de Natty es imborrable”, dijo el por entonces intendente Héctor Gay.
“La persona más especial que conocí”, expresó Federico Susbielles, hoy jefe comunal.
Y entonces: ¿si cambiamos el nombre de la avenida Pringles?
En esa misma avenida está el hogar que ella fundó.
¿No sería justo que esa calle se llame Natty Petrosino?
#UnaCalleParaNatty
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